¿Cómo se divertían los antiguos egipcios? Existían muchas opciones de ocio y al igual que nosotros contaban con juegos de mesa para rellenar sus ratos libres. El más famoso de todos ellos era el Senet.
Se sabe que se jugaba al Senet desde muy antiguo, al menos toda la historia unificada del antiguo Egipto ya que en un muro de una mastaba de la tercera dinastía, la de Hesy-ra supervisor de escribas del rey Djeser, está pintada una referencia al citado juego. También se encontraron referencias a otros dos juegos conocidos como mehen y men. Se han encontrado juegos del Senet en diversas tumbas a lo largo de la historia incluyendo el periodo pre-dinástico siendo la más famosa hoy día la de Tut anj imen (Tutankamon) en la que se encontraron cinco tableros. Suelen estar elaborados de madera, marfil o fayenza. Su nombre significa “pasar” o “ir”. En total se han encontrado unos 100 tableros, completos o fragmentados, y, aunque en algunos hay casillas especificas con funciones concretas, las únicas 5 casillas que permanecen inmutables en todos ellos son las cinco últimas.
Es un juego para dos personas que consta de un tablero dividido en tres filas con diez casillas cada una y un número de piezas de cinco o diez dependiendo de la variedad elegida, pudiéndose jugar también con siete. Las piezas de los dos jugadores se distinguen por la forma, siendo cónicas o cilíndricas y de colores claro y oscuro. Esa era la norma o el tablero base, porque se han encontrado figuras de diversos colores. Las casillas por las que pasan las fichas se conocen como peru (casas).
Tablero restaurado encontrado en Abydos actualmente en el Metropolitan Museum of Art, New York
El objetivo del juego es dejar las piezas del rival del tablero. El movimiento de las fichas no se determina por dados sino por cuatro tablillas o palos que por un lado no tienen nada y por otro son negras o con motivos diversos. Si se trata de palos se marcan en un lateral. Al tirar las cuatro se avanza tanto como tablillas caigan del lado vacío pudiendo moverse hasta cuatro casillas máximo en un mismo turno. Sin embargo, si caen todas del mismo lado se mueven seis casillas.
Siempre que un jugador consiga avanzar 1, 3 ó 6 casillas tiene un nuevo turno, así hasta que saque un 2 o un 4. Cuando dos fichas del mismo jugador ocupan casillas contiguas se protegen mutuamente y evitan ser capturadas por el rival. Si son tres las fichas que se encuentran juntas impiden que las fichas del rival puedan pasar a través de ellas, solo las suyas pueden saltarlas. Se capturan las fichas del rival cayendo en la misma casilla que una solo de ellas con una tirada exacta, si se pasa de largo no se captura. Capturar implica que las fichas intercambian su posición en el tablero. Si el movimiento hacia adelante no es posible se debe avanzar hacia atrás.
Imagen de la mastaba de Hesy-ra en Saqqara donde se ha documentado la más antigua representación del Senet.
A lo largo del tablero existen una serie de casillas especiales con reglas propias que comprenden desde la casilla 26 hasta la 30. Por ejemplo, la 26 (nefer) dando al jugador un turno extra y la 27 (agua) manda tu ficha a la casilla de salida. Las casillas 28, 29 y 30 indicaban los números de casillas restantes para salir del tablero con referencias numéricas: 3, 2 y 1 (hombres, pájaros, etc.) y quizá indicaban que se requería sacar ese número exacto para conseguirlo.
Durante el imperio medio se ha constatado de tableros en los que las casillas decoradas se encuentran en la esquina superior izquierda en lugar de la inferior derecha indicando que se jugaba en dirección contraria a los tableros encontrados de otros periodos.
Hay que tener en cuenta que no podemos estar seguros de que estas fueran las normas del juego ya que no nos han llegado las mismas de ningún modo por lo que actualmente es la forma de jugar consensuada a la que se ha llegado y que se ha establecido.
El juego se asocia al paso a la otra vida por parte del difunto asimilando los peligros que este debe afrontar con el paso de las casillas y las casillas especiales que hay en él. Por este motivo, además de como un juego, debe ser entendido como un aspecto muy importante de la cultura que en determinados periodos de la historia llegó a ser tan importante como para acompañar al difunto en la tumba o pintar las paredes de la misma con imágenes del juego.
A raíz de esta interpretación hay que destacar el capítulo 17 del libro de los muertos en el que el fallecido juega a senet contra un oponente invisible.
Es posible hoy día encontrar algunos tableros de Senet en diversos comercios y recrear este pasatiempo tan popular en el Antiguo Egipto. El ejemplo de la siguiente ilustración se vende en Amazon.
Es posible hoy día encontrar algunos tableros de Senet en diversos comercios y recrear este pasatiempo tan popular en el Antiguo Egipto. El ejemplo de la siguiente ilustración se vende en Amazon.
De la misma forma podemos encontrar aplicaciones para móvil en las que recrear este popular pasatiempo. A continuación podéis encontrar el enlace a un par de ellas con las que podréis ir familiarizándoos con las reglas y pasar un buen rato.
(Entrada revisada y actualizada a 20/05/2020)
Bibliografía:
In search of the meaning of Senet - Peter A. Piccione (1980)
Passing from the Middle to the New Kingdom: A Senet Board in the Rosicrucian Egyptian Museum - Walter Crist (2020)
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